...Hoy toqué tierra y dimensioné en lo que estamos, pero no tengo idea de hacia dónde vamos, ni qué será de nosotros. Espero que estemos juntos y cada día con mas amor...
Una vez mas me vuelvo víctima de mis palabras, y culpable de mis profundos y extensivos silencios, de cada gesto que hago, de mis miradas y expresiones inevitables de afecto. Cómo quisiera que al mirarte de inmediato el mundo se paralizara, para que nadie mas que tú vea mis inmensos ojos brillando ante tu extraña belleza, y no se dieran cuenta del amor que emana de mi y menos que tu eres el responsable de tanta alegría junta. No caigo en mí cuando te miro a los ojos, la mezcla de sensaciones es exactamente la misma del primer día, verte tomando café en la mañana con la cabeza agacha y leyendo el diario es una imagen que vería por siempre con agrado, cómo me gustaría despertar con ella.
Me dí cuenta en estos días que va casi un año, y este amor no para de crecer. Imaginé al principio que seria un platonicismo todo esto, luego una aventura a la lista de los sin amor, y hoy por hoy ya quiero compartir contigo aquellas cosas cotidianas de la vida real, como las conversaciones de todo y nada antes de dormir, o fregar los trastes el domingo en la tarde, hacer las compras del supermercado y celebrar años nuevos para volver a comenzar, cómo me gustaría despertar todos los días de mi vida junto a ti.
De perfecto no tienes nada, y eso es lo que te hace tan macabramente adorable, tu vulgaridad y simpleza me hacen reír casi a carcajadas, tus aires de grandeza despiertan en mi una falsa lástima que adoro, y tu carencia de sex appeal es lo que me prende al límite de querer desnudarte cada vez que te veo. Eres todo lo que nunca soñé, y te amo por eso.
